Por Gabriel D'Angelo
La ausencia del legislador de la Coalición Cívica Guillermo Smith en la sesión especial convocada, sin éxito, para pedir la interpelación de los ministros Guillermo Montenegro y Mariano Narodowski, dejó al descubierto las diferencias que existen en el bloque de Elisa Carrió en la Legislatura porteña. Estas disonancias, consecuencia de la diversidad de partidos que agrupó Lilita, generan incertidumbre sobre su futuro, principalmente luego del recambio legislativo del 10 de diciembre, y sobre la postura que tomarán ante las políticas macristas sus integrantes, ya que no siempre coincidieron en su parecer.
Los diputados nacionales Fernanda Reyes y Fernando Sánchez (futuro legislador porteño) y el diputado porteño Facundo Di Filippo, todos del ARI, fueron los tres que pidieron formalmente la destitución de Smith del partido y del bloque de la CC en el Parlamento de la Ciudad, por haber faltado a la mencionada sesión especial y haber impedido el quórum el pasado miércoles 21 de octubre. Los legisladores argumentaron que Smith tampoco apoyó el pedido de interpelación a Jorge “el Fino” Palacios, diferenciándose una vez más de sus compañeros de bloque.
El acusado, indignado por el pedido de sus compañeros de partido, manifestó ante NOTICIAS URBANAS que “están llevando a la Legislatura una interna del partido, que viene desde que éste se fundó”. Smith dijo que las diferencias con Sánchez y Di Filippo surgen “como consecuencia de las diversidades políticas en las que se fundó el ARI”, pero que nunca pensó que “terminarían de esta manera”. También sostuvo que Sánchez es un súbdito de Carrió que pretende que él también lo sea. Pero que no lo logrará.
La historia del ARI y de la Coalición Cívica muestra que existe un marcado verticalismo a la hora de tomar las decisiones. Al menos eso es lo que denunciaron muchos de los que abandonaron el partido, como el legislador Fernando Cantero (Autonomía con Igualdad) y su par Fernando Melillo, presidente del bloque hasta mediados de 2006. A partir de eso se puede entender el silencio de Carrió ante la situación que vive su espacio en Perú 130.
Fernando Sánchez es un lilito de pura sangre que tiene relación directa y de extrema confianza con la líder de la CC-ARI. Teniendo en cuenta que Sánchez fue uno de los que presentó el pedido de destitución de Guillermo Smith, está todo dicho. Asimismo, el legislador Facundo Di Filippo sentenció: “Hablamos con Carrió. Dijo que cualquier decisión que tomáramos nosotros le parecía bien porque entiende la autonomía que tiene el partido en la Ciudad. Es una postura que la consensuamos con otros dirigentes como Sánchez y Reyes. Esperamos que nos apoyen los demás”.
BUSCANDO UN BLOQUE MÁS SÓLIDO
La decisión de pedir la expulsión de Guillermo Smith responde a un cambio fuerte de política que se propone el partido de Elisa Carrió en la Legislatura. En especial, luego del 10 de diciembre. Según comentó en off the record una fuente que conoce la nueva orientación que asumirá el bloque CC a partir del recambio legislativo, el pedido de Elisa Carrió es “formar un bloque más sólido en la Ciudad”. Esta misma persona argumentó que, de esa forma, se quiere evitar “mamarrachos como el que protagonizaron Smith y Di Filippo”. Y agregó: “Se sabía que las diferencias existían hace rato y que podrían haber evitado esta situación, faltando un mes para retirarse”. A Guillermo Smith y a Facundo Di Filippo, justamente, se les vence el mandato a fin de año.
Pero el objetivo de Carrió, de formar un bloque unido, se puede dificultar considerando que, para las últimas elecciones, la líder de la Coalición Cívica entabló una nueva alianza con fines electorales. Así formó, junto a la UCR, el Acuerdo Cívico y Social (ACyS), que obtuvo seis bancas: Adriana Montes, Rocío Sánchez Andía y Fernando Sánchez, representando al ARI; Juan Pablo Arenaza, por Unión por Todos, de Patricia Bullrich, y los radicales Claudio Pressman y Rubén Campos. Con ellos trabajarán los actuales legisladores de la CC, Sergio Abrevaya y Diana Maffía, quienes tienen mandato hasta 2011.
Una vez más, la confluencia de muchos partidos en un mismo espacio. ¿Habrá consenso? Por lo pronto, Claudio Pressman y Rubén Campos ya anunciaron que formarán un bloque radical independiente, alejándose del liderazgo directo de Carrió. Aunque confirmaron, al mismo tiempo, que “la idea es trabajar en conjunto” con los legisladores del ACyS. Siempre y cuando “los objetivos sean comunes”.
Con la misma perspectiva piensa el candidato de la diputada nacional Patricia Bullrich, Juan Pablo Arenaza, legislador electo, quien afirmó que la intención es “armar un interbloque junto a los legisladores de la UCR y del socialismo para trabajar en conjunto”. Además, expresó: “Queremos instrumentar un bloque para dirimir los conflictos internos, tener una posición política definida y votar juntos”. Por su parte, Adriana Montes, futura legisladora y lilita de la primera hora, comentó que la meta es “trabajar con consenso, con más seguridad que antes, para lograr un espacio fuerte”.
Pero las diferencias ya florecen. El lunes pasado, los legisladores electos por el ACyS se reunieron para comenzar a definir las políticas que intentarán implementar desde el año que viene, y para establecer, asimismo, en qué comisiones trabajará cada uno. Si bien estas cuestiones todavía no están cerradas, los legisladores radicales electos por el ACyS no fueron invitados al encuentro.
EL DESAFÍO DE CARRIÓ
Elisa Carrió recluta gente. Suma y suma. Lo hizo con el ARI, luego con la CC y, este año, con su nuevo partido: CC-ARI. Quienes la tienen como líder la siguen incondicionalmente, pero otros se cansan y la dejan al ver que la chaqueña rompe pero no dobla.
En este marco, los lilitos deberán luchar en la Legislatura para lograr la unidad entre los radicales, los socialistas y el legislador bullrichista (cuya jefa ya mostró ciertas diferencias con Carrió al no adherirse a la CC-ARI), para tener protagonismo en una Legislatura que se perfila con una dura oposición, con el nuevo bloque de centroizquierda de Pino, y con el ingreso de dirigentes gremiales como Francisco “Tito” Nenna, del kirchnerismo.
De esa manera, el objetivo principal es “lograr una oposición al macrismo, constructiva, que no se oponga porque sí”, señaló a NU Fernando Sánchez, quien presidirá el bloque de la CC-ARI y tendrá el enorme desafío de satisfacer a su madrina política. Ahora bien, si llegado el caso se produce la ausencia de un legislador para dar quórum en una sesión especial, de trascendencia política, el propósito será difícil de concretar.
Los diputados nacionales Fernanda Reyes y Fernando Sánchez (futuro legislador porteño) y el diputado porteño Facundo Di Filippo, todos del ARI, fueron los tres que pidieron formalmente la destitución de Smith del partido y del bloque de la CC en el Parlamento de la Ciudad, por haber faltado a la mencionada sesión especial y haber impedido el quórum el pasado miércoles 21 de octubre. Los legisladores argumentaron que Smith tampoco apoyó el pedido de interpelación a Jorge “el Fino” Palacios, diferenciándose una vez más de sus compañeros de bloque.
El acusado, indignado por el pedido de sus compañeros de partido, manifestó ante NOTICIAS URBANAS que “están llevando a la Legislatura una interna del partido, que viene desde que éste se fundó”. Smith dijo que las diferencias con Sánchez y Di Filippo surgen “como consecuencia de las diversidades políticas en las que se fundó el ARI”, pero que nunca pensó que “terminarían de esta manera”. También sostuvo que Sánchez es un súbdito de Carrió que pretende que él también lo sea. Pero que no lo logrará.
La historia del ARI y de la Coalición Cívica muestra que existe un marcado verticalismo a la hora de tomar las decisiones. Al menos eso es lo que denunciaron muchos de los que abandonaron el partido, como el legislador Fernando Cantero (Autonomía con Igualdad) y su par Fernando Melillo, presidente del bloque hasta mediados de 2006. A partir de eso se puede entender el silencio de Carrió ante la situación que vive su espacio en Perú 130.
Fernando Sánchez es un lilito de pura sangre que tiene relación directa y de extrema confianza con la líder de la CC-ARI. Teniendo en cuenta que Sánchez fue uno de los que presentó el pedido de destitución de Guillermo Smith, está todo dicho. Asimismo, el legislador Facundo Di Filippo sentenció: “Hablamos con Carrió. Dijo que cualquier decisión que tomáramos nosotros le parecía bien porque entiende la autonomía que tiene el partido en la Ciudad. Es una postura que la consensuamos con otros dirigentes como Sánchez y Reyes. Esperamos que nos apoyen los demás”.
BUSCANDO UN BLOQUE MÁS SÓLIDO
La decisión de pedir la expulsión de Guillermo Smith responde a un cambio fuerte de política que se propone el partido de Elisa Carrió en la Legislatura. En especial, luego del 10 de diciembre. Según comentó en off the record una fuente que conoce la nueva orientación que asumirá el bloque CC a partir del recambio legislativo, el pedido de Elisa Carrió es “formar un bloque más sólido en la Ciudad”. Esta misma persona argumentó que, de esa forma, se quiere evitar “mamarrachos como el que protagonizaron Smith y Di Filippo”. Y agregó: “Se sabía que las diferencias existían hace rato y que podrían haber evitado esta situación, faltando un mes para retirarse”. A Guillermo Smith y a Facundo Di Filippo, justamente, se les vence el mandato a fin de año.
Pero el objetivo de Carrió, de formar un bloque unido, se puede dificultar considerando que, para las últimas elecciones, la líder de la Coalición Cívica entabló una nueva alianza con fines electorales. Así formó, junto a la UCR, el Acuerdo Cívico y Social (ACyS), que obtuvo seis bancas: Adriana Montes, Rocío Sánchez Andía y Fernando Sánchez, representando al ARI; Juan Pablo Arenaza, por Unión por Todos, de Patricia Bullrich, y los radicales Claudio Pressman y Rubén Campos. Con ellos trabajarán los actuales legisladores de la CC, Sergio Abrevaya y Diana Maffía, quienes tienen mandato hasta 2011.
Una vez más, la confluencia de muchos partidos en un mismo espacio. ¿Habrá consenso? Por lo pronto, Claudio Pressman y Rubén Campos ya anunciaron que formarán un bloque radical independiente, alejándose del liderazgo directo de Carrió. Aunque confirmaron, al mismo tiempo, que “la idea es trabajar en conjunto” con los legisladores del ACyS. Siempre y cuando “los objetivos sean comunes”.
Con la misma perspectiva piensa el candidato de la diputada nacional Patricia Bullrich, Juan Pablo Arenaza, legislador electo, quien afirmó que la intención es “armar un interbloque junto a los legisladores de la UCR y del socialismo para trabajar en conjunto”. Además, expresó: “Queremos instrumentar un bloque para dirimir los conflictos internos, tener una posición política definida y votar juntos”. Por su parte, Adriana Montes, futura legisladora y lilita de la primera hora, comentó que la meta es “trabajar con consenso, con más seguridad que antes, para lograr un espacio fuerte”.
Pero las diferencias ya florecen. El lunes pasado, los legisladores electos por el ACyS se reunieron para comenzar a definir las políticas que intentarán implementar desde el año que viene, y para establecer, asimismo, en qué comisiones trabajará cada uno. Si bien estas cuestiones todavía no están cerradas, los legisladores radicales electos por el ACyS no fueron invitados al encuentro.
EL DESAFÍO DE CARRIÓ
Elisa Carrió recluta gente. Suma y suma. Lo hizo con el ARI, luego con la CC y, este año, con su nuevo partido: CC-ARI. Quienes la tienen como líder la siguen incondicionalmente, pero otros se cansan y la dejan al ver que la chaqueña rompe pero no dobla.
En este marco, los lilitos deberán luchar en la Legislatura para lograr la unidad entre los radicales, los socialistas y el legislador bullrichista (cuya jefa ya mostró ciertas diferencias con Carrió al no adherirse a la CC-ARI), para tener protagonismo en una Legislatura que se perfila con una dura oposición, con el nuevo bloque de centroizquierda de Pino, y con el ingreso de dirigentes gremiales como Francisco “Tito” Nenna, del kirchnerismo.
De esa manera, el objetivo principal es “lograr una oposición al macrismo, constructiva, que no se oponga porque sí”, señaló a NU Fernando Sánchez, quien presidirá el bloque de la CC-ARI y tendrá el enorme desafío de satisfacer a su madrina política. Ahora bien, si llegado el caso se produce la ausencia de un legislador para dar quórum en una sesión especial, de trascendencia política, el propósito será difícil de concretar.
*Nota publicada en el semanario Noticias Urbanas en octubre de 2009, disponible en http://www.noticiasurbanas.com.ar/info_item.shtml?sh_itm=f0dcdaafd09c3a0f121a0e829ccdb77e
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